domingo, 6 de febrero de 2011

Pedacito de amor delirante
colgado de tu cuello un sábado de lluvia a las cinco de la tarde.

miércoles, 2 de febrero de 2011

Descreída?


En qué momento te convertiste en una descreída del amor? Se preguntaba a ella misma… En qué momento dejaste de creer que podías amar para toda la vida? Cuando paso que dejaste de imaginarte junto a tu amor tejiendo para tus nietos? Cuando mataste a la “Susanita” que siempre vivió latente en vos? En qué momento dijiste abiertamente “mentiría si jurara amor eterno”? No podía responderse…

Cuando uno elije sentarse en un el fondo del cráter más profundo, aunque sea un ratito a la semana, no hay expectativas de nada, menos que menos llegar a la cima de una montaña.

De la nada me pregunte a mi misma si puedo decir en qué momento deje de creer. Y lejos de replantearme la tristeza que puede generar despertarme a una realidad, me alivió. Y pude hacer algunas afirmaciones que me hicieron sentir mejor.

“En el amor creo”. “No importa si el príncipe destiñe, nunca importa el color cuando es el indicado”. “Quien puede pedirle a otra persona que la ame eternamente? yo no”. “Disfruto del enamoramiento, pero detesto creer que es una patraña”. “Nada me genero mas satisfacción en la vida que decirle a alguien que no estaba enamorada, solo lo amaba”.

No estoy descreída del amor, a mi entender asumí que el cuento de hadas es un cuento. Y yo elijo vivir la realidad… El tiempo dirá si puedo prometerlo para toda la vida… o solo vivirlo.

martes, 1 de febrero de 2011

PACIENCIA

La obviedad de tu universo antagónico le robo las chances al futuro.

Sin embargo, te extraño.